El sastre puede ajustar aquí y allá
Nuestro octavo y ultimo consejo para ser una ViejaconEstilo es utilizar un sastre no solamente para coser ropa nueva. El sastre puede ser de gran ayuda para lograr un ajuste impecable
1. Organiza tu Closet
2. Familiarízate con tus curvas
3. Experimenta! Crea nuevos atuendos combinando la ropa que ya tienes
4. No te limites a comprar solo en tus tiendas favoritas
5. Lee revistas, artículos y blogs de moda
6. Ponte solo lo que te hace sentir confortable y confiada en ti misma
7. Ve de compras con tu hermana o tu mejor amiga
8. El sastre no es solo para coser ropa nueva, también puede ajustar aquí y allá
Corina- No necesitamos gastar mucho dinero en ropa, pero sí debemos asegurarnos de que nos quede bien. Los atuendos bien adaptados muestran que te preocupas por ti misma y que eres detallada. La ropa nunca debe ser demasiado ajustada, demasiado grande, demasiado larga o como hemos compartido antes nunca demasiado corta. La mayoría de las prendas tienen el tamaño para adaptarse lo suficientemente bien a la mayoría de las personas. Sin embargo, un sastre puede ajustar la ropa lo suficientemente bien para adaptarse perfectamente al cuerpo. Frecuentemente necesito que el sastre ajuste los hombros de mis vestidos o túnicas ya que necesito comprar una talla mas grandes para que me queden bien en las caderas.
Ana- Hay veces que encuentras algo que te fascina y es o muy grande o no se ajusta bien a tu cuerpo. En estos casos lo llevo a un sastre. Hay otras veces en las que amas algo que inexplicablemente sobrevive mudanzas y limpiezas de closet. Compre este vestido mini al principio de los 80s en una tienda (Tropicana) en Caracas-Venezuela y acabo de descubrir que es un vestido de Eva Kayan. Este vestido me ha seguido por unos 40 años. Recientemente me di cuenta que no solamente ya era muy corto pero que también me quedaba muy justo en las caderas. Pensé; Que puedo hacer? Busqué unas tijeras y corte la falda del vestido transformándolo en un top de ropa largo que ahora uso sobre pantalones de jean. Yo no soy sastre pero pude darle nueva vida a esta prenda de ropa que adoro. Viejas no se rindan. Siempre se puede hacer algo para conservar una prenda amada.
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